Un galés enamorado de España
El actor británico Luke Evans, conocido por sus papeles en El Hobbit y Fast & Furious, ha expresado en varias ocasiones su profundo afecto por España. Durante una entrevista con El Mundo, Evans compartió su amor por la cultura española, destacando su pasión por la gastronomía, la música y la arquitectura .
Sabores que conquistan
Evans no escatima en elogios hacia la comida española. Confesó su predilección por platos como las almejas, los boquerones en vinagre y las banderillas, que suele disfrutar con su suegro. Además, mencionó su gusto por acompañar estas delicias con una caña o un tinto de verano .

La pasión del flamenco
El actor también expresó su admiración por el flamenco, describiéndolo como una manifestación del “drama” y la “pasión” inherentes a la cultura española. Para él, esta intensidad se refleja en todos los aspectos de la vida en España, desde la comida hasta la música y la arquitectura .
Un hogar en Malasaña
Evans vivió durante un tiempo en el barrio madrileño de Malasaña, experiencia que fortaleció su vínculo con España. Actualmente, reside en Madrid junto a su pareja, Fran Tomás, y su perrita Lala, disfrutando de la vida cotidiana y la calidez de los españoles .
Una autobiografía sincera
Durante su visita a España, Evans presentó su autobiografía El chico de los valles de Gales, donde relata aspectos personales de su vida, incluyendo su orientación sexual y los desafíos enfrentados durante su juventud en una familia de testigos de Jehová. Su historia busca inspirar a quienes atraviesan situaciones similares .

Un momento musical inesperado
En el programa El Hormiguero, Evans sorprendió al público interpretando con entusiasmo la canción “Esa Diva” de Melody junto al presentador Pablo Motos. Este gesto demostró su aprecio por la cultura popular española y su disposición a integrarse plenamente en ella .
Una frase para recordar
Entre las expresiones que Evans utilizó para describir su amor por España, destacó una que capturó la atención de muchos: “Hay pasión”. Esta frase, sencilla pero poderosa, ha sido considerada por algunos como digna de estamparse en una camiseta, simbolizando la intensidad y el fervor que caracterizan a la cultura española .
Luke Evans ha demostrado ser más que un visitante ocasional; es un verdadero admirador de España y su cultura. Su entusiasmo y aprecio por el país ibérico han resonado tanto en entrevistas como en apariciones públicas, consolidando su imagen como un embajador informal de la pasión y el encanto españoles.